La llanta Conti GreenConcept, presentada en IAA Mobility 2021, muestra cuál podría ser la llanta del futuro. Pero algunos de sus ingredientes sostenibles ya están en uso hoy. Taraxagum, caucho hecho de dientes de león, fue desarrollado junto con nuestros socios del Instituto Fraunhofer de Biología Molecular y Ecología Aplicada IME y la Universidad de Münster. En este proyecto de investigación único, pudimos encontrar una materia prima alternativa eficiente en recursos para la producción de llantas. A diferencia del árbol del caucho, que solo crece en los trópicos, la planta de diente de león ruso se cultiva en Alemania, por lo que el caucho de sus raíces se puede extraer y procesar localmente, sin tener que transportarlo a largas distancias. Esto reduce las emisiones de CO2 y conserva valiosos recursos. Taraxagum ya se está utilizando en llantas para bicicletas y prototipos de llantas para camiones.
La movilidad sostenible está habilitada por muchos factores: política, infraestructura, tecnología, pero también comportamiento de conducción. La buena noticia: los hábitos de conducción ecológicos son económicamente ventajosos. En definitiva, al ahorrar CO2, también ahorrarás dinero. Por ejemplo, una llanta con una resistencia a la rodadura reducida aumenta la autonomía o la eficiencia del combustible de un vehículo. Además del diseño de una llanta, la presión de aire correcta también contribuye a reducir la resistencia a la rodadura, así que asegúrese de comprobar la presión de aire periódicamente y ajustarla según sea necesario. Cuando se trata de estilo de conducción, la constancia lo hace, así que acelere y desacelere suavemente, evite las velocidades excesivas y reduzca el peso de su vehículo y optimice su aerodinámica eliminando todo lo que no necesita.
Si bien la resistencia a la rodadura marca una diferencia notable en la eficiencia del combustible y las emisiones de todos los vehículos motorizados, o en la autonomía de los vehículos eléctricos, es un factor muy importante en los vehículos pesados. El sector del transporte es una de las principales fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero provocadas por el hombre, incluido el dióxido de carbono. La UE mide e informa la resistencia a la rodadura de camiones, autobuses y autocares nuevos para reducir estas emisiones y lograr un transporte neutral para el clima para 2050. Las llantas para camiones de baja resistencia a la rodadura de Continental pueden ayudar a reducir las emisiones generadas por flotas enteras, reduciendo la significativamente la huella ambiental del transporte por carretera. La resistencia a la rodadura también es muy importante en nuestro desarrollo de llantas agrícolas y llantas especiales, por ejemplo, los que se utilizan en carretillas elevadoras eléctricas. En ambos casos, las reducciones potenciales de CO2 son considerables, lo que contribuye a una agricultura y una logística más limpias.
1. Reducir
Trabajamos constantemente para reducir la cantidad de materiales que utilizamos y aumentar la cantidad de materias primas renovables que se utilizan en nuestras llantas. Al mismo tiempo, tomamos medidas para reducir la huella de producción de todas nuestras innovaciones, así como el impacto que tienen en el medio ambiente cuando están en uso.
2. Reutilizar
Aumentamos constantemente la proporción de materiales reciclados en nuestros productos, por ejemplo, mediante el uso de poliéster de botellas de plástico recicladas para la carcasa de la llanta y acero, caucho o negro de carbón reciclados en lugar de nuevos recursos.
3. Reciclar
Desde aumentar la longevidad de nuestros productos (por ejemplo, mediante el recauchutado de llantas desgastadas) hasta el reciclaje de materiales al final de su ciclo de vida, nuestro objetivo es reutilizar en lugar de desechar los valiosos ingredientes que fabrican nuestros productos de alta tecnología.
Descubre más con una llanta que necesita menos. Gracias al mejor equilibrio entre el tamaño de la llanta y la distribución de los componentes, el EcoContact™ 6 y su compuesto de sílice de alta tecnología mejoran la resistencia a la rodadura, para que reduzcas tanto el consumo de combustible como las emisiones de CO2.
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